Si bien los perros de presa de adultos pueden resultar algo
peligroso, cuando éstos son cachorros representan a una de las criaturas más
dulces que hay en el reino animal, y aprovechar esto resulta muy beneficioso
para educarlos de manera que podamos evitar el comportamiento salvaje en un
futuro.
En primer lugar deberemos tener en cuenta que los
cachorros suelen estar muy acostumbrados a dormir junto con su mamá y sus
hermanitos, y los únicos olores que reconoce son los de su hogar, por
esta razón, es probable que la primera noche lejos de su familia extrañe y
pueda llegar a llorar durante toda la noche, e incluso, debido al stress que
les produce el cambio de hogar quizás desarrollen síntomas como la fiebre y la
diarrea. Para evitar que el cachorro sufra con la separación, es importante que
estemos todo el tiempo que podamos junto a ello y les demos mucho cariño para
que no se sienta desprotegido, pero para evitar algunos síntomas que son más
físicos que psicológicos, es importante que no les cambiemos el alimento hasta
que no se acostumbren a sus nuevos dueños y a su nuevo hogar.
Otro punto importante es que a los cachorros les
gusta mucho el calor, por eso por las noches es importante que duerma en un
ambiente tibio, y jamás debemos dejarlos dormir afuera especialmente en
invierno ya que muchas raza que puede llegar a morir por el frío. Lo
mejor es armarles una camita con algunas frazadas y mantas abrigadas y si
tenemos la oportunidad de colocarle alguna manta que tenga el olor de su viejo
hogar esto los hará sentir mucho mejor.
Y teniendo en cuenta la costumbre de dormir con sus hermano,
los que podemos hacer es colocar en la cama una bolsa de agua caliente que este
bien envuelta en mantas, para que no se quemen, y así le crearemos la sensación
de que no esta solo. Mas allá de que las primeras noches puedan llegar a llorar
por que extrañan una vez que se acostumbran a su hogar no son para nada
molestos, de hecho suelen adecuarse a los horarios de sus amos, es decir que se
van a dormir y se levantan a la misma hora que su dueño. Algo muy importante
que debemos tener en cuenta en la educación del cachorro es que éstos son muy
obedientes pero solo reconocen a un solo amo, que será la persona a la cual más
respetarán y obedecerán. Ahora bien, si se nos presentan situaciones en las
cuales no queremos que el cachorro haga algo como subirse a alguna superficie
alta o mordisquear muebles y cortinas, es preciso que los retemos con una voz
firme pero que nunca les peguemos ni atinemos a hacerlo ya los perros
de presa s0n unas de las razas más fuertes que existen en la especie, y
esto lo debemos tener en cuenta en todo momento de su educación, ya que el fin
de la crianza es que el perro sea tan dócil como sociable. Justamente, una buena
manera de lograr esto es que los acostumbremos a estar con muchas personas, ya
que los cachorros pitbull tienen un carácter muy lindo con las personas y
justamente exponerlo a que diferentes personas lo acaricien y pasen tiempo con
el además de que le hablen con cariño es una gran contribución para la mascota.